Soy Todo, soy Nada, solo Soy.
Aunque sé que no soy el personaje, y que lo que verdaderamente somos no necesita presentación, quiero contarte brevemente quién es Eva en la forma.
Desde muy joven comencé una búsqueda profunda motivada por el dolor propio y ajeno. Estudié Trabajo Social y Psicología, trabajé durante años en el ámbito de la exclusión social y la discapacidad, y me formé en Psicoanálisis. Sin embargo, a pesar de todo ese recorrido, sentía que algo esencial faltaba.
Ese vacío empezó a aclararse cuando encontré a maestras como Consuelo Martín y enseñanzas como Un Curso de Milagros, que transformaron radicalmente mi percepción del sufrimiento, del cuerpo, de la enfermedad, y del sentido de la vida. En el camino atravesé desafíos físicos muy intensos, que me llevaron a rendirme de verdad y a elegir la paz como única prioridad.
Hoy acompaño procesos desde una mirada integradora: psicológica, espiritual y honesta. Ya no creo en fórmulas mágicas ni en salvadores. Creo en el poder del silencio, en el reconocimiento de nuestras heridas, y en la posibilidad de volver al Amor, ahí donde parecía haber miedo.
Este espacio no pretende ser un escaparate. Es una pausa. Una invitación a dejar de demostrar y empezar a recordar.
Si algo de lo que comparto resuena contigo, tal vez no sea casualidad.
Con cariño,
Eva